Hola a todas(os)
Aunque estés luchando con mil batallas por dentro. Recuerda que aun cuando el enemigo quiera aplastar tu fe, eres tú quien tiene que decirle basta ya... Ponerle un alto!!! No te rebeles a Dios por causa de tu lucha. Más bien, levántate y abre tu corazón. Permite que Dios cambie lo que el tenga que cambiar, AUNQUE TE DUELA!!! Y Dios en base a tu fe, te hablará, se moverá y te confirmará. No te aferres a cosas pequeñas porque Dios tiene algo más grande para ti. Y ni el enemigo podrá arrebatar de tus manos esas promesas que Dios te ha echo. Recordando que es al momento de Dios no al nuestro.
Dios te bendiga
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